Semana Grande de Donostia-San Sebastián
Abordaje
Miles de piratas abordan la playa de La Concha
Redacción
Más de 4.000 donostiarras han intentado cubrir el recorrido y más de 400 balsas han tomado parte. Algunas de ellas han accedido a la costa, pero muchas de ellas se han quedado por el camino.
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Miles de personas han participado este lunes por la tarde en el Abordaje Pirata dentro de la Semana Grande de Donostia.
Se trata de uno de los actos más esperados de las fiestas de la capital de guipuzcoana, ya que moviliza a un alto número de jóvenes y mayores, siempre asegura diversión y, además, el tiempo ha acompañado en esta edición.
Los "piratas" que han tratado de llegar a la playa de la Concha han preparado sus embarcaciones en el puerto.
Más de 4.000 donostiarras han intentado cubrir el recorrido y más de 400 balsas han tomado parte. Como cada año, algunas de ellas han accedido a la costa, pero muchas de ellas se han quedado por el camino.
El buen tiempo se ha aliado con los "piratas", lo que ha facilitado la llegada a la playa de las numerosas embarcaciones que han participado en esta edición.
Cientos de personas se han sumado a este festejo de la Aste Nagusia, que cada año cuenta con más seguidores y que forma parte del programa oficial de fiestas, aunque en origen estuvo adscrito al alternativo del colectivo Donostiako Piratak.
Paisaje multicolor
Un paisaje multicolor mostraba el puerto donostiarra a las cinco de la tarde, hora del "txupinazo" con el que ha arrancado el abordaje, que se ha producido de forma escalonada, con las últimas lanchas haciéndose al agua 45 minutos después, dada la masiva participación. Las últimas embarcaciones no han llegado a salir a causa del viento en contra.
Palés, neumáticos, barcas hinchables, flotadores, remos de plástico y banderas al viento formaban parte de esta amalgama de piratas donostiarras, algunos de los cuales han aprovechado también para hacer visibles sus reivindicaciones, como los que han lucido las camisetas naranjas de la plataforma Libre, que defiende "el fin de los juicios políticos".
Pese a lo improvisado de las embarcaciones, la mayoría han conseguido llegar a su destino en un estado más o menos aceptable, aunque algunas han ido perdiendo parte de su estructura durante el trayecto, y otras prácticamente la totalidad.
