Sociedad -
Caso Sansoheta
Una víctima de abusos del caso Sansoheta afirma que al menos un acusado sabía que era menor: "Le dio igual"
La mayoría de las víctimas del caso de corrupción y abuso sexual de menores tutelados por la Diputación de Álava han reconocido en el juicio que no aparentaban ser mayores de edad cuando mantuvieron los encuentros sexuales con los acusados, y que estos nunca les pidieron el DNI para asegurarse.
EITB MEDIA
Euskaraz irakurri: Sansoheta auziko biktima batek dio gutxienez akusatu batek bazekiela adingabea zela: "Berdin zitzaion"
Una de las víctimas de abusos del caso Sansoheta, en el que diez hombres están acusados de corrupción y abuso sexual de menores tutelados por la Diputación de Álava, ha señalado en la sesión del jueves del juicio que al menos uno de los acusados sabía que era menor de edad, y que a este le dio "igual". La mayoría de las víctimas han reconocido en el juicio que no aparentaban ser mayores de edad cuando mantuvieron los encuentros sexuales con los acusados, y que estos nunca les pidieron el DNI para asegurarse.
Así, continúa en la Audiencia Provincial de Álava el juicio, que arrancó el pasado lunes, con diez hombres en el banquillo de los acusados. De ellos, cuatro han llegado a un acuerdo de conformidad con las acusaciones, y, tras reconocer los hechos, serán condenados a penas que oscilan entre uno y 13 años de cárcel. Los otros seis continúan siendo juzgados por los delitos de corrupción de menores, abuso sexual, exhibición de pornografía ante menores y delitos contra la salud pública.
Durante su declaración el pasado lunes, los seis argumentaron que desconocían que las personas a las que pagaban por sexo eran menores, y afirmaron que pensaban que todo era legal, porque contactaban a través de una web de adultos.
Este caso saltó a la luz en noviembre de 2016, tras una denuncia del director del centro Sansoheta de Vitoria-Gasteiz, que entonces acogía a menores con problemas de comportamiento cuya tutela había sido retirada a sus progenitores.
En la actualidad las víctimas ya son mayores de edad. Cinco de ellas han declarado a puerta cerrada el jueves, y el miércoles ya lo había hecho una; según han informado fuentes de la acusación, han confirmado los contactos sexuales con los acusados, y la mayoría ha corroborado que en el momento de los hechos no aparentaba ser mayor de edad. Alguno, incluso, ha afirmado que le reconoció a un acusado que tenía menos de 18 años, y que a este le dio "igual".
No les pidieron el DNI
También han indicado que "jamás" les pidieron el DNI, y que cuando se produjeron los hechos no tenían conciencia de lo que hacían. Han afirmado que en un primer momento se sentían los "culpables" de lo sucedido, hasta que finalmente han llegado a entender que ellos eran las víctimas, no los culpables, algo que, una vez que han madurado, les ha generado un daño en sus vidas.
Estas afirmaciones no casan con la argumentación de las defensas, que mantienen que los jóvenes aparentaban ser mayores de edad y que engañaron fácilmente a sus clientes, han añadido las mismas fuentes.
En la sesión de este jueves han declarado además otros tres agentes de la Ertzaintza que, como mantuvieron ayer varios compañeros, han afirmado que las facciones de los jóvenes no dejaban dudas sobre su minoría de edad.
La Fiscalía solicita penas que superan los cien años de cárcel para los seis acusados que siguen en el banquillo de los acusados. En el proceso judicial, también está personada, como acusación particular, la Diputación de Álava, que se ha adherido a la petición del Ministerio Fiscal, y la Asociación Clara Campoamor, que, como acusación popular, reclama penas que oscilan entre los 15 y los 29 años y medio de prisión para los seis procesados.
El juicio continuará el viernes, con la declaración de más agentes de la Ertzaintza.