Sociedad -
Violencia machista
El acusado de asesinar a Mbeugou asegura que no quería degollarla, que el corte se produjo en un forcejeo
Maguette Mbeugou murió degollada por una lesión de 13 centímetros en el cuello, calificada ayer de "brutal" en el juicio por el forense que le practicó la autopsia, tras recibir, al menos, 83 cuchilladas.
agencias | eitb media
Euskaraz irakurri: Maguette Mbeugouren hiltzaileak esan du ez ziola lepoa moztu nahi, borrokan ari zirela gertatu zela
Bara N., acusado de asesinar en 2018 en Bilbao a su esposa, Maguette Mbeugou, ha sostenido durante la posterior reconstrucción de los hechos que "no tenía intención" de degollar a su mujer y que el corte que ella presentaba en el cuello se produjo en un forcejeo entre los dos.
"No tenía intención", se ha oído repetir al acusado en el vídeo, de casi una hora de duración, que recoge la reconstrucción de los hechos ante la comitiva judicial y que ha sido emitido este viernes en la sexta sesión del juicio que se sigue en la Audiencia de Bizkaia.
Está acusado de matar a cuchilladas el 24 de septiembre de 2018 a su mujer, de 25 años, en el domicilio familiar de la calle Ollerías, en Bilbao, delante de sus hijas de 2 y 4 años, que se quedaron solas con el cadáver cuando él se marchó de la vivienda.
Maguette Mbeugou murió degollada por una lesión de 13 centímetros en el cuello, calificada ayer de "brutal" en el juicio por el forense que le practicó la autopsia, tras recibir, al menos, 83 cuchilladas.
Durante la posterior reconstrucción de los hechos, el acusado mantuvo que sobre las seis de mañana del día citado, cuando se encontraba en una habitación de la casa con sus hijas, con las que dormía en la misma estancia tras llevar un tiempo de desavenencias con su mujer, ésta intentó agredirle con un cuchillo de cocina sin discusión previa.
Él se encontraba tumbado y ella encima, según su versión, y en el forcejeo intentando quitarle el cuchillo, que le provocó algunos cortes, el arma cayó al suelo en un momento dado. Al ir a cogerlo el acusado hizo un movimiento "tan fuerte" con el cuchillo que "hizo el corte" a la mujer en el cuello, según su relato.
"Vi que estaba sangrando demasiado", señaló el presunto autor, quien contó que las niñas se despertaron y empezaron a llorar. Según consideró, presenciaron la "agresión" de la mujer hacia él, pero no que su madre murió degollada porque para entonces las había instado a ir a otra habitación y se encontraban allí.
Después, cubrió el cadáver de la mujer con una manta, cerró la puerta de la habitación en la que estaba, permaneció ese día en casa, sin tener contacto con nadie, y no dejó entrar a las niñas en la habitación donde se encontraba el cuerpo, según su versión.
El acusado aseguró que no realizó labores de limpieza con lejía y atribuyó al "miedo" el hecho de que cogiese el cuchillo citado y otros cuatro que estaban en una encimera, así como ropa con sangre, y los metiese en una bolsa para tirarlos a un contenedor de Atxuri.
También indicó que fue el miedo que sentía lo que hizo que en lugar de acudir a una comisaría a contar lo sucedido, como inicialmente, según aseguró, era su intención, cogiera un autobús para dirigirse a Mutriku (Gipuzkoa), a casa de un amigo, donde fue finalmente detenido cuando se descolgaba por una ventana de la parte de atrás de la casa.
Conclusiones finales
El juicio por este caso continuará el próximo lunes, cuando las partes presentarán las conclusiones finales y los informes orales, tras lo cual comenzarán las deliberaciones del jurado.
La Fiscalía y las acusaciones particulares en representación del hermano de la víctima, el Ayuntamiento de Bilbao y la Diputación de Bizkaia piden para el acusado una pena cercana a los 40 años por un delito de asesinato, maltrato habitual y abandono de menores.
La defensa, por su parte, mantiene que se trata de un delito de homicidio, por el que pide 8 años de prisión.