Sociedad -
Mutilación Genital Femenina
Cada año se mutilan los genitales a tres millones de niñas
200 millones de niñas y mujeres han sido mutiladas en todo el mundo. El 6 de febrero se conmemora el Día Internacional de Tolerancia Cero contra la Mutilación Genital Femenina.
eitb.eus
Euskaraz irakurri: Urtero hiru milioi neskari mutilatzen dizkiete genitalak
Cada año se mutilan los genitales a tres millones de niñas y se calcula que 200 millones de niñas y mujeres han sido mutiladas en el mundo, según los datos de Cruz Roja Española con motivo de la celebración, el 6 de febrero, del Día Internacional de Tolerancia Cero contra la Mutilación Genital Femenina.
Cruz Roja Española ha trabajado desde el año 2000 en Malí contra esta práctica, centrando su intervención en la ciudad de Ségou. Los proyectos desarrollados allí, con la financiación de la Diputación Foral de Gipuzkoa, están encaminados fundamentalmente a prevenir la práctica de la ablación y proteger los derechos sexuales y reproductivos de niñas y mujeres.
La mutilación genital femenina (MGF) comprende todos los procedimientos consistentes en alterar o dañar los órganos genitales femeninos por razones que nada tienen que ver con decisiones médicas. La MGF está reconocida como una violación de los derechos humanos de las mujeres y niñas.
Esta práctica se concentra en 29 países de África y de Oriente Medio, sin embargo, se trata de un problema universal y es una práctica común en algunos países asiáticos como India, Indonesia, Iraq y Paquistán, así como entre algunas comunidades indígenas de Latinoamérica. Asimismo, persiste en las poblaciones emigrantes que viven en Europa Occidental, en Norte América, Australia y Nueva Zelanda.
Por su parte Cruz Roja Española ha trabajado durante dieciocho años en Malí, uno de los países con mayor índice de prevalencia de la escisión. De los 44 millones de niñas menores de 14 años que han sufrido la ablación, el 73 % se ha producido en Malí.
La Organización ha desarrollado diferentes proyectos en distintas regiones durante este tiempo, en colaboración con la Cruz Roja de Malí y con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID) y la Diputación Foral de Gipuzkoa, encaminados fundamentalmente a prevenir la práctica de la ablación y proteger los derechos sexuales y reproductivos de niñas y mujeres.