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Documentación
Cuarenta años de extorsión de ETA
En la primera etapa, combinaron atracos con secuestros, de los que algunos empezaron a terminar en asesinatos. Después pasaron a ser cartas a empresarios exigiendo cantidades de dinero, hasta hoy.
Redacción
El ataque de ETA a los empresarios arrancó hace cuarenta años. Durante una primera etapa, y por parte de las diferentes ramas, se combinaron los atracos a las nóminas de empresas, como el de CAF en 1974, con los secuestros para obtener rescates, que arrancaron en los años 1972 y 1973 con Lorenzo Zabala y Felipe Uharte.
Después, siguió una etapa en la que dos de esos secuestros terminaron ya en asesinatos, el de Ángel Berazadi, director gerente de Sigma en Elgoibar, en 1976, y Javier Ibarra, de una de las más conocidas familias de Neguri, en el 1977. Más recientes fueron el atentado contra José María Ruiz Urchegui (1996) o el asesinato de José Mari Korta en el año 2000.
Al mismo tiempo, y con esta presión, las cartas comenzaban a llegar a los empresarios con la exigencia de dinero en pago de lo que ETA llamaba el "impuesto revolucionario".
Secuestros cortos empezaron a dar paso en los 80 a otros más largos. A finales de los ochenta y primeros de los 90 llegaron los secuestros de varios meses: Emiliano Revilla, en 1988, estuvo 249 días cautivo; Julio Iglesias, el año 1993, estuvo 116 días; José María Aldaya (1995) 342 días y Cosme Delclaux, en 1996, pasó 232 días secuestrado.
Las redes de extorsión de ETA también comenzaron a sufrir continuas detenciones ya a partir de los 80, con la operación de ''Sokoa''. La última de esta operaciones fue la que se realizó en torno al Bar Faisán de Irun en 2006.
Algunas de las capturas de dinero por parte de las policías española y francesa fueron multimillonarias, como la cantidad incautada en París tras el secuestro de Revilla. Pero el gota a gota de esa exigencia de dinero en estos 40 años han sido las cartas, que de grandes empresarios pasaron a extenderse a profesionales liberales.
Varias estimaciones judiciales han elevado esos ingresos a cientos de millones de euros.