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Tragedia
18 niños de Fukushima padecen cáncer tras el accidente nuclear
Proponen elevar el nivel de alerta a la categoría 3 por la fuga de 300 toneladas de agua altamente radiactiva de un tanque de almacenaje.
Redacción
18 niños de Fukushima han desarrollado cáncer de tiroides tras el accidente nuclear, según los exámenes médicos llevados a cabo en la prefectura de Fukushima.
Las autoridades regionales ordenaron hacer revisiones médicas a los 360.000 niños, de hasta 18 años de edad, residentes en Fukushima para evaluar el impacto del accidente nuclear en su salud.
Los resultados, que se han hecho públicos este martes, han revelado que 18 han desarrollado cáncer de tiroides, mientras que otros 25 podrían padecer esta enfermedad, según ha informado la televisión pública NHK.
El grupo de expertos que ha llevado a cabo este estudio médico ha explicado que podría deberse a que las partículas radiactivas emitidas por la central nuclear se han acumulado en la glándula tiroides de los niños, aumentando el riesgo de desarrollar cáncer.
Los expertos han subrayado que no les ha sido posible determinar si el accidente nuclear ha aumentado el ratio de incidencia del cáncer de tiroides entre los niños de Fukushima.
Proponen elevar la alerta por la fuga de agua radiactiva
La Autoridad de Regulación de Japón (NRA) propone elevar la gravedad de la fuga de 300 toneladas de agua radiactiva detectada en un tanque de la central atómica de Fukushima del nivel 1 al 3.
La categoría 3 de la Escala Internacional Nuclear y de Sucesos Radiológicos (INES), que incluye ocho niveles de gravedad (de 0 a 7), se define como un "incidente serio".
El accidente en la planta de Fukushima, provocado por el terremoto y el tsunami del 11 de marzo de 2011, fue clasificado como un incidente de grado 7, nivel máximo con el que también se calificó el desastre en la central de Chernóbil en 1986.
Durante la junta rutinaria de hoy de la NRA, uno de sus comisionados, Toyoshi Fuketa, ha subrayado que el organismo debe tener cuidado para evitar causar malentendidos a la hora de evaluar la fuga de agua. "Esto no quiere decir que el accidente de nivel 7 ha terminado y que se ha producido un incidente de nivel 3. El accidente permanece activo", dijo Fuketa en declaraciones reproducidas por la agencia Kyodo.
La fuga, de unas 300 toneladas, fue confirmada ayer en uno de los cientos de tanques que se usan para almacenar parte del agua empleada como refrigerante para los reactores de la planta y que, pese a ser tratada posteriormente para retirar algunos materiales contaminantes, es altamente radiactiva.