Economía -
Ley Concursal
Diez empresas de Nueva Rumasa, al borde de la suspensión de pagos
Elgorriaga, entre otras. El líder José María Ruiz-Mateos ha dicho que "si no pudiera satisfacer las obligaciones de los que confiaron en nosotros y careciera de fe en Dios, me pegaría un tiro".
Redacción
Diez empresas de Nueva Rumasa se han acogido al procedimiento especial de la Ley Concursal que le otorga un plazo de hasta cuatro meses para negociar con sus acreedores un plan de pagos y evitar ser declarado en suspensión de pagos.
El patriarca de Nueva Rumasa, José María Ruiz-Mateos, ha anunciado hoy en una rueda de prensa en Madrid, junto a seis de sus hijos, que se ha tomado esta medida con el fin de proteger los intereses de los empleados y de los inversores que han depositado su confianza en el grupo.
Las empresas son: Clesa, Garvey, Hotasa, Dhul, Elgorriaga, Ibramer, Trapa, Carcesa, Quesería Menorquina y Rayo Vallecano.
Ruiz-Mateos ha asegurado hoy que "si no pudiera satisfacer las bligaciones de los que confiaron en nosotros y careciera de fe en dios, me pegaría un tiro".
Durante la rueda de prensa para explicar las medidas que ha adoptado para evitar que diez de sus empresas acaben en concurso de acreedores (antigua suspensión de pagos), el cabeza de la familia Ruiz-Mateos ha sostenido que "no podría soportar el sufrimiento" de no poder pagar las deudas que acumula el grupo.
"Gente que puso el dinero que tenían para vivir en nuestras manos en un acto de confianza se corresponden de la manera que acabo de repetir", ha asegurado Ruiz-Mateos en referencia a su posible suicidio.