Gipuzkoa Basket
GBC-Valencia (76-68)
El Lagun Aro logra su tercera victoria a base de trabajo y sufrimiento
Redacción
Los guipuzcoanos han podido dedicar la victoria a Miguel Santos. El partido se ha decidido en el último cuarto, donde los donostiarras han estado más acertados que el Valencia.
El Laguna Aro GBC ha conseguido doblegar al Valencia Basket (76-68) en Illumbe. De esta manera, los guipuzcoanos han conseguido su tercera victoria de la temporada, que el capitán David Doblas ha querido dedicar a Miguel Santos, presidente de honor del club, que se encentra hospitalizado tras sufrir un accidente de tráfico.
En el primer cuarto los dos conjuntos se han mostrado desacertados, sobre todo en ataque. Ambos equipos han demostrado cierto desorden a la hora de dirigir las acciones. En el caso del Lagun Aro, parece que el nerviosismo por la situación que atraviesan los donostiarras se ha trasladado a la cancha.
Aún así, los de Sito Alonso han defendido más fuerte que anteriores partidos y eso les ha hecho mejores ante la mediocridad del Valencia Basket. Los donostiarras se han ido al primer descanso tres arriba en el marcador (18-15).
En el segundo cuarto Lagun Aro ha afinado algo más su sinfonía, pero la igualdad ha presidido el parcial. El Valencia Basket también se ha metido en el partido y ha demostrado ser un equipo muy correoso e incómodo. Así, los guipuzcoanos han tenido que sudar para mantenerse arriba en el luminoso, pero finalmente lo han conseguido (43-39).
Tras las buenas sensaciones del primer tiempo, en la reanudación el Lagun Aro ha vuelto dar malas sensaciones y parecía que iba incurrir en lo mismos errores que le han condenado hasta ahora. Además, los colegiados han pitado una dudosa antideportiva a Papamakarios, lo que ha complicado sobremanera el cuarto.
Pese a las dificultades el Valencia no ha estado muy fino y los donostiarras se han ido por delante en el marcador al último parcial (56-54). En el último cuarto el Valencia Basket ha perdido muchos balones y los guipuzcoanos han seguido sufriendo.
Sin embargo, afición y jugadores han comenzado a creer en la victoria, y eso se ha convertido en un arma mortal para el Valencia, que finalmente ha caído en Illumbe, no sin sufrimiento.