Baloncesto
Primer partido
El FC Barcelona sorprende en Madrid
Redacción
El Barcelona recuperó el factor cancha en el primer partido de la eliminatoria final por el título de liga, al imponerse en el Palacio de Deportes por 93-98 al Real Madrid.
Ficha técnica
93 - Real Madrid (16+28+29+20): Rudy Fernández (16), Mirotic (4), Darden (10), Llull (12) y Bourousis (10) -equipo inicial-, Carroll (9), Rodríguez (16), Slaughter (2), Mejri (8) y Reyes (6).
98 - Barcelona (23+25+22+28): Marcelinho (12), Papanikolau (6), Navarro (14), Nachbar (17) y Tomic (17) -equipo inicial-, Dorsey (5), Sada (2), Abrines (7), Oleson (5), Lorbek (5) y Lampe (8)
La crónica
El Real Madrid volvió a comenzar de aquella manera, con un 0-7 en poco más de un minuto y con un dejar de hacer en defensa preocupante. Laso no tuvo más remedio que pedir el primer tiempo muerto a los 3.45 minutos, cuando el marcador reflejaba un preocupante 4-12, producto también de falta de acierto en el lanzamiento de los blancos.
Con el Real Madrid intentando recomponerse (min. 4.11 y 5-12), falló la luz. Hubo diez minutos de parón y se reanudó el juego con la penumbra en ambos aros.
A partir de este momento, el Madrid quiso pero no pudo ante un Barcelona con las ideas más claras y con la puntería mucho más afinada, con Nachbar como el más certero.
Tras el 16-23 con el que finalizó el primer cuarto, llegó el turno de Jaycee Carroll, autor de los siete primeros puntos de su equipo y verdadero revulsivo de un Real Madrid que pareció resurgir, sobre todo cuando en el minuto 12.43 Darden anotaba dos tiros libres y ponía el empate a 27 en el marcador.
Pero el Real Madrid incumplió una de las máximas del baloncesto: que la remontada no culmina hasta que no se pone uno por delante en el marcador. Y el Madrid no lo hizo. Y ocurrió que tres minutos después había aceptado un parcial de 2-12, volviendo el marcador a un inquietante 29-39.
La diferencia máxima que tuvo el Barcelona fue un 31-43 (min.16.20), momento en el que los defensores del título volvieron a aumentar su nivel defensivo y a ir recortando poco a poco la desventaja.
Al descanso se llegó con un 44-48, tras un juego denso, farragoso, trabajado, sin brillantez, en el que cada balón fue importante y en el que el Real Madrid fue a trompicones, liderado por Rudy, Carroll y el 'Chacho' Rodríguez, y siempre por detrás de un Barcelona más lúcido, centrado y efectivo, con Tomic y Nachbar como sus referentes ofensivos.
El Madrid volvió a empatar el partido (55-55, min. 23), con una canasta de Darden, pero volvió a dejar incompleta la remontada y el Barcelona volvió a coger aire en el marcador, 57-62 (min. 24.20). Bourousis volvió a empatar a 62, pero no fue hasta la jugada siguiente cuando el propio Bourousis, ahora con un triple, consiguió la primera ventaja local en el marcador, 65-64.
Tras casi 27 minutos de partido el Real consiguió mandar en el marcador. En la jugada siguiente, una transición rápida culminada por Llull llevó el 67-64 al marcador, momento que aprovechó Xavi Pascual para parar el partido y refrescar las ideas de sus jugadores.
Al Barcelona le comenzaron a temblar las piernas, cuando la ventaja local ascendió a los cinco puntos, 71-66 (min.28), aunque una fugaz zona del Real Madrid fue aprovechada por Marcelinho, muy vigilado durante todo el partido, para tomar el relevo anotador de Nachbar y evitar que el Madrid se marchara peligrosamente en el luminoso.
Al final del tercer cuarto se llegó con un 73-70 que dejó abiertas todas las posibilidades.
Un triple de Oleson devolvió la paridad al marcador (73-73) en el primer minuto del cuarto de la verdad. Laso, que había reservado a Carroll como un as en la manga, sacó al escolta estadounidense, aunque su efectividad no fue tan prominente como en el segundo período.
Con 82-79 y a falta de casi seis minutos, Pascual pidió tiempo muerto porque el Real Madrid estaba comenzando a sentirse cómodo en la pista, algo fatal para los intereses de un Barcelona batallador al que se le estaba agotando los recursos.
Tomic anotó el 82-83, a falta de cuatro minutos y medio, que puso de nuevo por delante al Barcelona, y Sada firmó el 82-85 pocos segundos después.
Cada jugada comenzó a ser una agonía, cada defensa un mundo y cada posesión de balón una posibilidad de victoria. Una auténtica ruleta de la que el Barcelona sacó ventaja, 86-91, a falta de minuto y medio.
Reyes y Navarro. desde el tiro libre, dejaron el marcador en 88-93 y al Real Madrid sin margen de maniobra con apenas 37 segundos de juego por delante.
El Barcelona ganó por 93-98, se apuntó el 0-1 recuperó el factor cancha y pone al Real Madrid entre la espada y la pared, porque jugó con fuego y acabó quemándose.
Un dato: En ocho de las nueve ocasiones en que en una eliminatoria final se "robó" el factor cancha el equipo que lo hizo acabó ganando el título.