Zinemaldia 2024
18-26 de septiembre
El Festival de San Sebastián se blinda ante la COVID para preservar su esencia
AGENCIAS | REDACCIÓN
Las mascarillas y la limpieza de manos serán obligatorias, las entradas se venderán exclusivamente online, para "facilitar la trazabilidad" y se mantendrá la distancia de seguridad.
El Festival Internacional de Cine de San Sebastián arrancará contra viento y marea el próximo 18 de septiembre con un formato reducido, sin alfombras rojas, autógrafos o selfis, blindado contra la COVID-19 para preservar su esencia, "su corazón": la experiencia del cine con público en sala.
"El público podrá ver películas, en menos cantidad y menos gente, pero la gente va a poder seguir viendo películas, lo fundamental del Festival se mantiene, el corazón del Festival va a estar ahí y esa va a ser nuestra apuesta", ha expresado su director, José Luis Rebordinos, durante el acto de presentación oficial del certamen este viernes en San Sebastián.
Tras meses de incertidumbre, el Zinemaldia se celebrará con una reducción de películas y proyecciones, y con aforos del 50 % y del 60 % en todas las salas, excepto en el auditorio del Kursaal, donde entrarán un máximo de 600 personas -por debajo del 50%- para extremar la seguridad.
El Festival programará 65 películas menos que en 2019, (una reducción del 31 %), y 159 proyecciones menos que en 2019, lo que implica un 23 % menos, con el objeto de permitir un acceso y desalojo de las salas más ordenados y para disponer de entre una hora y una hora y media para la correcta "higienización" de los cines.
Las mascarillas y la limpieza de manos serán obligatorias, las entradas se venderán exclusivamente online, para "facilitar la trazabilidad" y se mantendrá la distancia de seguridad, aunque dos personas que convivan podrán ver las películas juntas.