Cine
Entrevista
"Los Xey tenían una potente base musical clásica y también dominaban la música popular"
Natxo Velez | EITB Media
Eneko Olasagasti y David Berraondo prestrenan mañana, martes, en San Sebastián, "Los Xey, una historia de película", un documental sobre la popular banda donostiarra de las décadas de 1940 y 1950.
-
Los Xey, en Argentina en 1947
Euskaraz irakurri: "Los Xeyk oinarri musikal klasiko indartsua zuten, eta herri musika ere maisuki menperatzen zuten"
Recién llegados de la Seminci, Semana Internacional de Cine de Valladolid, los cineastas Eneko Olasagasti y David Berraondo prestrenarán el documental Los Xey, una historia de película este martes, 25 de octubre, en el teatro Victoria Eugenia de San Sebastián (19:00 horas) y el miércoles, día 26, en Errenteria.
Este trabajo audiovisual en el que participa EITB, que resume la historia del grupo vocal donostiarra que cosechó una gran popularidad en el mundo entero entre 1940 y su desaparición en 1961, llegará a los cines de Hegoalde el 4 de noviembre.
Hemos hablado con Olasagasti y Berraondo.
¿Cuál es el origen de la película?
Eneko: Yo soy de 1960, y pasé toda mi infancia escuchando a Los Xey por la radio: sus canciones estaban dentro de mi mochila musical, a pesar de que no fuera consciente de ello. Un día, me encontré con Loyola Garmendia, de Golden Apple Quartet, y el acordeonista Xabier Zabala, me contaron que estaban trabajando en un espectáculo de homenaje a Los Xey, y me comentaron algunas cosas sobre su extraña biografía.
Me parecieron increíbles, algo sin parangón en la historia de la música vasca, y llamé a David Berraondo para decirle que detrás de esa historia podría haber un documental. Para mi sorpresa, me dijo que uno de los miembros de Los Xey, Txiki Lahuerta, era su tío.
Ahí fue cuando se prendió la mecha, y el fuego nos ha traído luego hasta aquí.
Eneko Olasagasti
¿Cómo ha sido la labor de búsqueda de invitados y el proceso de recopilar documentacion sobre el grupo?
Eneko: Pues no ha sido fácil porque apenas quedaban contemporáneos suyos; y los pocos que quedaban fallecieron antes de poder hacer la entrevista, ya que el proceso de producción se alargó mucho debido a razones que todos conocemos. Entonces, recurrimos a la siguiente generación: hijos e hijas, nietos y nietas.
Además de ellos y ellas, buscamos también personas expertas que nos hablaran sobre aquella época y la música de entonces. Hemos intentado reconstruir el recorrido de Los Xey, y ese camino nos ha llevado a encontrarnos con expertos y expertas de Euskal Herria, Madrid, Barcelona, Buenos Aires, Ciudad de México y La Habana.
Por último, hemos tenido la colaboración de Golden Apple Quartet a través de algunas canciones de su homenaje a Los Xey.
David: Respecto a la documentación artística y personal, comenzamos el proyecto con unas pocas fotografías, pero pronto apareció una caja llena de recuerdos junto a la documentación que la familia de Pepito Yanci guardaba en Lesaka.
Unos meses después, esa documentación se amplió con una maleta que las hijas de Txomin Arrasate guardaban en México.
La discografía no ha sido un problema, porque Eresbil guarda muchas discografías y se han mostrado dispuestos a ayudar desde el principio.
Desde el conocimiento que os ha dado ese material, ¿qué hizo especial a Los Xey? ¿A qué se debió su éxito en las décadas de 1940 y 1950?
Eneko: Coincidieron varios factores en el camino al éxito. Para empezar, por un lado tenían una potente base musical clásica y también dominaban la música popular. Por ejemplo, les era muy cercana la mezcla entre música y humor que existía en las sociedades gastronómicas.
Todo eso les ofrecía la oportunidad de empastar perfectamente sus voces para conseguir un sonido muy especial y personal. Tenían una personalidad muy especial a la hora de cantar, y a todo eso hay que sumarle su habilidad para abordar cualquier estilo musical.
Además, tenían una gran tendencia por la tendencia y el humor, un humor blanco que todo el mundo comprendía. Y eso era muy importante en tiempos donde había censura.
Los Xey, en México
¿Cómo les llegó el éxito en pleno inicio del franquismo a este grupo de jóvenes republicanos donostiarras? ¿Qué relación tenían con los y las exiliadas en América?
Eneko: Por un lado, es importante subrayar el papel que tuvo la Iglesia para insertar a los perdedores republicanos como nuestros protagonistas. Crearon coros como Schola Cantorum, y los fundadores de Los Xey formaron parte de ellos. El repertorio estaba formado principalmente por canciones religiosas, pero pronto comenzaron por su cuenta a preparar repertorio laico. Luego tuvieron bastantes cambios, y pasaron dos o tres años hasta que afianzaron su formación.
Con los exiliados, tanto con los y las vascas como con los y las republicanas españolas, tuvieron un relación muy directa y cercana en todos los países, sobre todo en Argentina, México y Cuba, y también en Nueva York. Sobre todo, con los Centros Vascos. Se sucedían las bienvenidas, homenajes y despedidas.
Para el exilio suponían aire fresco y una oportunidad de cantar en euskera y en libertad.
¿Qué canciones debería escuchar quien se acerque a Los Xey?
Eneko: Su repertorio estaba formado por más de trescientas canciones. La gente se quedará alucinada que algunas canciones formen parte de ese repertorio, que fueron ellos quienes las hicieron famosas.
Una canción que podría reflejar su espíritu humorístico es "La Señora Baronesa". También están ahí sus los clásicos vascos: la canción de cuna de Brahms, "Maitetxu mía", "Maite" y otras cuantas.
Sus canciones más conocidas fueron "El menú" y "Oh, Pepita"; después estarían "Cielito lindo", "Alma, corazón y vida", "De mil amores", "Me lo dijo Adela", "La paloma", etcétera.
Entre las curiosidades, aunque no lo parezca, ellos fueron quienes hicieron conocidas y populares "La vaca lechera" y "Si vas a Calatayud".
David Berraondo
Tras pasar por la Seminci, ¿qué camino le espera a la película a partir de su prestreno?
David: La película se presentará en San Sebastián, en el estreno del Victoria Eugenia. Después, la asociación Ollagorra homenajeará a Los Xey, y sus familiares recibirán un presente.
El 4 de noviembre se estrenará en cines de San Sebastián, Bilbao, Vitoria y Logroño, y estamos esperando a la respuesta de Pamplona.
Después irá a Madrid y Barcelona, y continuará por otras capitales, dependiendo de los resultados.
En lo que respecta a los festivales, el objetivo principal es el circuito latinoamericano, y estamos a la espera del Festival de Cine Iberoamericano de La Habana.
El año que viene se ofrecerá una versión de 60 minutos en EITB y el programa "Imprescindibles" de La 2.