Cine
Entrevista
María Cerezuela: 'Maria Jauregi es la persona que, después de mi familia, me ha dado la mayor lección de vida'
Natxo Velez | EITB Media
La actriz vasca está nominada al premio Goya a mejor actriz revelación por su papel de Maria Jauregi en la película "Maixabel".
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María Cerezuela, durante el rodaje de "Maixabel"
Euskaraz irakurri: María Cerezuela: 'Maria Jauregi da nire familiaren ondoren bizitzaren inguruko irakatsi handiena eman didana'
"Maixabel", uno de los acontecimientos cinematográficos del año pasado, opta a catorce premios Goya en la gala de entrega que se celebrará este próximo sábado, 12 de febrero, en Valencia. Uno de ellos es al que opta la actriz María Cerezuela (Barakaldo, 1993) en la categoría de mejor actriz revelación por su emocionante interpretación de Maria Jauregi, hija del político asesinado por ETA Juan María Jauregui.
En vísperas de la principal noche del cine español, hemos hablado con Cerezuela sobre cómo se siente ante la cita, cómo fue interpretar a una persona real como Maria Jauregi y su trabajo en la película, dirigida por Icíar Bollaín y en la que participa EITB.
Zorionak por la nominación, María! ¿Cómo recibiste la noticia?
Estaba con mi hermana y mi madre en Berlín. Ninguna de las tres teníamos datos en el móvil para escuchar y ver la lectura de nominadas y nominados, pero mi madre se pudo conectar un rato y lo pudimos ver.
Bueno, en realidad la que lo vio y me dio la noticia fue mi hermana, ya que yo estaba muy nerviosa. Me agarré al brazo de mi madre hasta que escuché a mi hermana gritar: "¡Que sí! ¡Que sí!". Acto seguido, nos abrazamos las tres muy fuerte. Fue muy emotivo.
¿Te la esperabas, a pesar de que Maixabel sea tu primer largometraje?
Realmente, en ningún momento pensé que podría salir nominada. Durante el rodaje, solo pensaba en hacer bien mi trabajo. Aunque mentiría si te dijera que en ningún momento he soñado con ello.
Cuando quedaban pocos días para el anuncio de las nominaciones, lo daba por perdido.
María Cerezuela
¿Cómo ha sido interpretar a Maria Jauregi?
Maria Jauregi ha sido la persona que, después de mi familia, me ha dado la mayor lección de vida.
Interpretar a un personaje real, que existe, que te observa, es muy difícil porque tienes mucha responsabilidad encima. He aprendido mucho a nivel profesional, pero creo que he aprendido más a nivel personal.
Maria me ha enseñado lo que realmente es el amor, la generosidad y la empatía. Tanto ella como Maixabel son mujeres increíbles. Es como si no pertenecieran a esta tierra. Con ella he aprendido a no ser tan egoísta, que es algo que tanto nos caracteriza a los humanos; a mirar más por lo que necesita o quiere la otra persona y no tanto por lo que deseamos.
A Maria le estaré eternamente agradecida.
¿Qué límites te impone trabajar sobre material real?
El respeto y la responsabilidad. Pero yo creo que también hay ventajas: existen unos ojos a los que mirar y una voz a la que escuchar.
¿Has tenido relación con la propia Maria antes de interpretarla?
Sí. Quedé con ella antes de empezar a rodar.
Yo estaba muy nerviosa. Llegué media hora antes a la cita, y, en cuanto la tuve enfrente, le dije que no quería entrevistarla, ni sacarle información. Al final estuvimos hablando de un montón de cosas que no tenían nada que ver con el tema. Y fue maravilloso.
Poder sentir su energía fue lo que me ayudó a afrontar el papel.
María Cerezuela, entre Portillo y Bollaín
¿Cómo ha sido trabajar con gente tan experimentada como Iciar Bollaín, Blanca Portillo y Luis Tosar?
Un lujo en todos los sentidos. Y entre estos tres monstruos hay que citar también a Urko Olazabal. Trabajar con los cuatro ha sido un regalo.
Icíar es un ser de luz, una profesional que sabe qué quiere y cómo lo quiere; una directora que acompaña, que escucha, que respeta y que valora al actor o a la actriz.
Blanca me cuidó muchísimo, y para mí siempre será una persona muy especial y a la que quiero mucho.
Y con Luis no tuve el privilegio de estar tanto, pero es un ser mágico y muy divertido.
¿Qué relación habéis tenido durante el rodaje?
Desde el principio hubo un ambiente de entrega y de respeto tremendo. Tanto el equipo técnico como el artístico íbamos de la mano, y nuestro cuerpo y mente estaba en la película 100 %.
¿Cómo se desconecta emocionalmente después de grabar escenas como la del pantano, en la que Maria se entera del asesinato de su padre?
Respirando y soltando. Ese día fue el que más sentí que todos trabajábamos juntos. Ese día nos abrazamos mucho.
¿Cómo se trabaja la implicación y el alejamiento de esas emociones?
Yo soy una actriz que confía mucho en su intuición, por lo que, antes de rodar esta secuencia, me alejé un rato del equipo.
Anduve por la orilla, cerré los ojos y pensé en Maria.
María Cerezuela y Blanca Portillo ('Maixabel')
¿De qué manera te imaginas la noche del 12 de febrero?
Rodeada de mi equipo, de mis amigos, de mi familia y de mi chico. Y a partir de ahí, a disfrutar.
¿Cómo te gustaría que se desarrollara?
De la manera que haga que esa noche la gente a la que quiero y yo seamos felices.
¿Qué películas, estén o no nominadas a los Goya, han llamado tu atención en el último año?
"Ama", de Julia de Paz. Tanto la trama como Tamara Casellas me parecen brillantes. Ella era mi apuesta no solo para salir nominada, sino para ganar el Goya.
"Libertad", de Clara Roquet, también me llama mucho.
¿Tienes algún proyecto entre manos?
Ahora mismo estoy en un proyecto que no tiene nada que ver con lo que he hecho hasta ahora. Es otro registro completamente diferente, y eso me gusta.
¿En qué te gustaría poder trabajar?
En el teatro. Lo echo muchísimo de menos.