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Biografía: José Luis Rodríguez Zapatero, el declive del talante
La crisis económica se ha llevado por delante el optimismo de aquel diputado casi desconocido que ganó las primarias del PSOE y que, contra todos los pronósticos, llevó a su partido a La Moncloa.
Redacción
El presidente del Gobierno saliente, José Luis Rodríguez Zapatero (Valladolid, 4 de agosto de 1960), ha conocido las caras del éxito y el fracaso durante sus dos legislaturas en la Moncloa.
Zapatero irrumpió con fuerza en la primera línea de la política y al frente del Ejecutivo con una primera legislatura marcada por las iniciativas de calado social, aunque se ahogó en la segunda, arrastrado por una crisis económica que aún amenaza con reventar las economías de la zona euro y con unas cifras de paro asfixiantes (casi cinco millones de parados en España). Aún así, también será recordado como el presidente que logró acabar con la violencia de ETA.
José Luis Rodríguez Zapatero, diputado por León desde 1986, dio un paso al frente en el año 2000 al encabezar la corriente reformadora "Nueva vía", nacida con la idea de modernizar el PSOE tras la crisis de liderazgo en la que se veía sumido desde la dimisión de Felipe González en 1997.
En el 35 Congreso del partido, Zapatero ganó las primarias al veterano José Bono por nueve votos y llegó a la secretaría general del partido. Comenzaron entonces cuatro años de renovación en la oposición, caracterizados por el "talante", el diálogo y la firma de algunos acuerdos con el Gobierno de José María Aznar, como el Pacto Antiterrorista.
El PSOE le eligió en 2002 de forma unánime candidato a las elecciones generales de 2004. Con todas las encuestas en contra, tres días después de los atentados del 11-M los socialistas ganaron las elecciones, Zapatero fue investido presidente el 16 de abril y desde su llegada a La Moncloa decidió dejar su impronta cumpliendo compromisos y retiró las tropas españolas de Irak.
Esta decisión se convertiría en la bandera de su primera legislatura, marcada por iniciativas emblemáticas para la izquierda como la ley del matrimonio homosexual, la reforma del divorcio, la ley de igualdad, la Alianza de Civilizaciones o la ley de la memoria histórica. Su proyecto más complicado, fue la negociación con ETA, un diálogo en el que arriesgó hasta, como el mismo ha reconocido, equivocarse al confiar en que el fin estaba cerca pocos días antes del atentado de la T-4.
Ese ha sido el principal error que se ha reprochado al presidente del Gobierno de España, calificado por sus colaboradores de serio, discreto, con las ideas claras, y a quien, al menos hasta los últimos tiempos, siempre le acompañaba la suerte.
El 9 de marzo de 2008 Zapatero ganó por segunda vez las elecciones generales, pero esta nueva legislatura se convirtió, casi desde sus inicios, en su calvario, abocado por la crisis a aprobar reformas impopulares, alejados del ideario de la izquierda, que además no demostraron ser eficaces. Su legado económico, de hecho, estará marcado por los casi cinco millones de parados.